domingo, 18 de octubre de 2009

Sobre Silva, Nick Cave y esos grandes administrativos

Dios, el puñetero Silva es un inútil. A ver si con este partido la gente deja de inflar a ese chaval. Pese a que nunca se sabe, me apuesto el cuello a que con Villa en el campo el Barça se hubiera llevado por lo menos dos. Aunque claro, con ese ser omnipotente llamado Puyol – ese al que le faltan dos días para sacar un córner y rematarlo dos segundos después – cualquiera apuesta. En fin. Que contento me tienen. Y encima lo ando pagando con los niños. Para matarme. O para matarles a ellos, no estoy del todo seguro. Casi mejor les acuesto ya.

Ayer me quedé en coma. Tengo la teoría de que aunque mi cerebro sabía que había quedado, decidió que ya había tenido suficiente. Por eso mi gran amigo decidió no despertarme cuando llegó a mi casa y le comunicaron que estaba en otra puta galaxia. Cuando desperté, decidí hacer un par de llamadas. Una a mi amigo para disculparme, y otra a otro amigo, del que tenía una llamada perdida que llegué a escuchar a eso de las seis de la mañana. Ya eran las diez. Hijo de perra. Verás que bien le sienta a tu resaca el politono barriobajero que gastas.

He tenido una semana mitómana. Me he acordado de Larra cientos de veces, de Cheshire otras cuantas y al final de esa mierda de proceso que incluye a esos abortos de Satanás denominados funcionarios administrativos me acordé mucho del bueno de Sócrates. Y en mi desesperación, de Diógenes. Dios. Lo feliz que sería yo en un barril. Con diez enchufes y wifi, claro.

Y encima el genio de Nick Cave saca su segundo libro y yo estoy en la parra. Y Spike Lee y Robert de Niro van a hacer una serie de televisión. Y John Paul Jones, Josh Homme y Dave Growhl han formado una banda. Y Dexter cada día es mejor. Y tengo que gastarme un pastizal como inversión para mi futuro y me va a doler. Bueno. Con suerte volveré a chocar de frente con la guitarrista de Dover y esta vez, en vez de disculparme, le diré que la primera púa que cogí en un concierto la tiró ella. E igual hasta le hace ilu.

Por favor, cariño. Ese tipo de cosas las puedes soltar la tercera o la cuarta vez, no la quinta o la sexta. O sea que nunca. Nada de nada. Jamais. En realidad no sé de qué me quejo, si me viene bien. En medio del más costoso de mis despertares, será como un reto. Además, el otro día ya… Eso mismo. La próxima vez, querida, espero que mis ojos estén a la altura de los tuyos. Ya sabes. Por el morbo.

Oh, y estoy esperando las más sinceras disculpas de un par de asociados y de sangre de mi sangre. Oh si. Pero creo que no me van a llegar. Qué coño. Yo también debería haber llamado a mi ex y haber quedado con ella. Total, si el amigo que se fue a trabajar a otra provincia para olvidarla lo hace, ¿por qué no yo?

Déjame pensar. Si. Ya sé. Quizás porque pensaría que estoy borracho – y me parece que me faltaban otros catorce Chivas para estarlo – o puesto – y me parece que me faltaba dinero, tiempo y ganas - . O quizás sospechaba que no le apetecería ver mi carita. O quizás es que siento algo de respeto por mí mismo. Quién sabe. Yo tengo una razón, y volveré a ACTUAR.

PD: seguro que me dejo más mierda. A las dos personas y media a las que les gusta mi otro tono (ese tan poco pedante), no desesperen, tengo una pequeña anécdota sobre la Benemérita por terminar.

4 comentarios:

Hallenbeck dijo...

A mí tampoco me gusta demasiado Silva, pero no veas lo que me gustó su actuación contra el Barça. Visto desde la perspectiva culé, claro. Debe ser amigo íntimo de Valdés, porque vaya puntería...

Sturm dijo...

Kazan campeón de la Champions este año...No te digo más nada...

PD: Escrito después de ver a Iker saliendo a por uvas en el 1-2 de lo que ha acabado en 2-3....

Víctor Kaláshnikov dijo...

buen texto

Zephyr dijo...

Empezando por lo trivial (o no, según se mire) y acabando en la más brutal sinceridad, teniendo en cuenta lo público de ésta página. Sinceridad, he dicho? Bueno, no tiene por qué; escribes de verdad aunque lo que digas sea mentira.